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Los 9 cuidados y mimos que me pide mi coche antes y durante el verano

En nada tenemos aquí el verano y nuestro coche o furgoneta ya nos está reclamando a gritos que lo actualicemos y lo preparemos para la esperada estación. Parece que no, pero el calor y los largos viajes pueden afectar a nuestro coche y, como nos gusta cuidarlo, mejor que sigamos estos tips para que nada se nos pase por alto en vistas a la estación más calurosa del año.

Seguro que has pensado: las ruedas. Pues sí. Son importantes y hay que revisarlas cuando se acerca el calor, pero no nos avancemos. Hay otras cosas igual o incluso más importantes.

Este año, antes de ir al pueblo en verano o antes de esas vacaciones en coche por la península que tanto estás esperando, mimarás tu coche, tanto si vas en coche propio, como si vas en uno de renting, como si vas en una furgoneta camper, una autocarvana o la furgoneta del trabajo.

1 Mimar nuestra batería

La media de vida de la batería de un coche es de cinco años, pero, eso sí, siempre que evites, por ejemplo, aparcarlo en lugares con temperaturas altas, si recuerdas arrancar pisando bien el embrague siempre, si tienes cuidado con las instalaciones eléctricas de tu coche y si no lo tienes parado durante mucho tiempo. Pero, sobre todo, para tener cuidado de tu preciada batería, si se trata de un coche que duerme en la calle, pongamos por caso, ve aparcándolo ya a la sombra. Recuerda que la batería es muy sensible a los cambios bruscos de temperatura.

2 Esas ruedas que nos llevan a todos los sitios

Ahora sí les toca el turno a las ruedas. Dos palabras: presión y estado. Antes de que empiece a hacer un calor sofocante (y ya sabes que en nuestras ciudades y pueblos eso suele pasar antes del famoso cambio de estación) es de vital importancia comprobar la presión de los neumáticos y el estado de éstos. El asfalto caliente y un exceso de calor son nefastos para nuestras queridas amigas las ruedas, que soportan todo el peso del coche y que nos llevan de aquí para allá, así que esto puede provocar un desgaste prematuro. Revísalas y ve dándoles una miradita antes de la estación del sol.

3 Queridos líquidos de mi vehículo, ¿cómo estáis?

No sólo pensemos en el líquido refrigerante, también cabe pensar en el nivel del aceite y en el líquido limpiaparabrisas. Los talleres y cadenas de mantenimiento de confianza te aconsejarán que compruebes sus niveles antes y durante los meses de verano.

4 Cuidado con la sal y no sólo por la hipertensión arterial: ojo con el salitre

Una extremada exposición a agentes como el salitre puede ser nuestra perdición. En primavera puede que todavía no vayamos mucho a la playa, pero si hacemos alguna visita a algún paseo marítimo, tengamos cuidado con el salitre. Con lo que nos gusta bañarnos en el mar y qué mal nos sienta que el salitre que contiene ese agua sea uno de los principales enemigos de nuestro coche en verano y de los coches que aparcan en las zonas de costa habitualmente. La salinidad hace que pueda producirse corrosión, no sólo en los coches, como podrás haber observado en algunas fachadas de los pueblos de costa. Si quieres que tu coche luzca como el primer día tienes que hacernos caso con lo que te vamos a contar: cuando laves tu furgo o coche no olvides limpiar los pasos de rueda, las llantas y los neumáticos. Un buen desengrasante ablanda la sal y la manguera a presión es mano de santo.

5 Cuidado con la arena

Esto también es un consejo más de cara al verano propiamente, pero ahora que ya empieza a apretar el calor algunos días seguramente irás a la playa así que cuidado con la arena porque se cuela por todos sitios. En verano, estate pendiente de si entra arena en el coche porque eso puede hacerle daño a tu segunda casa. Los coches se llenan de arena cuando están aparcados próximos a la playa, por lo que es recomendable limpiar tanto el exterior como el interior del modelo para evitar desperfectos.

6 Recuerda limpiar el coche más frecuentemente de lo habitual

Limpiar, limpia y limpiar. No sólo cuando te vayas de vacaciones y los del pueblo tengan que ver tu coche. Lávalo siempre y con sumo cuidado por el exterior y por el interior. Algunas partes del interior pueden verse dañadas por los rayos ultravioleta. Tenlo en cuenta. La pintura puede sufrir daños si lo aparcamos mucho al sol. Si lo limpias bien y de forma más frecuente que en invierno y otoño evitas problemas de carrocería, cristales y tapicería.

7 Frenos y motor

No sé si sabías que el calor puede hacer que la potencia de tu motor se reduzca hasta un 15%. Mira constantemente la aguja que indica la temperatura del motor para evitar que llegue a la zona roja. Si el sistema de refrigeración no funciona bien puede hacer que el motor se caliente más de la cuenta, así que estate pendiente. Los frenos se ven afectados ya que las pastillas están expuestas al calor. Revisa, pues, los frenos antes de salir de vacaciones en tu taller de confianza.

8 Aire acondicionado

Qué importante es conducir a buena temperatura. La temperatura interior es esencial durante cualquier trayecto para mejorar la seguridad vial (un excesivo calor puede despistarnos al volante). Tener el aire acondicionado a punto ya antes del verano hará que nuestros trayectos sean más placenteros.

9 Antes de salir de vacaciones, revisión completa del vehículo

Un buen vistazo por parte de tu técnico de confianza hará que el viaje de este verano se prepare mucho mejor. Hazlo con tiempo, que ya sabemos que después vamos con una to do list demasiado larga para el viaje. Por lo menos que eso nos pille a tiempo.

Así que ya sabes, cuida de tu coche antes y durante el verano y te lo agradecerá.

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